Sentidos.

Erotizar sentidos a veces es inevitable. Más cuando tu olor me recorre cada vez que paso mi mano por mi vientre recordando la pauta de aquello que emana debajo de tu vientre rosando mi piel.

Como olvidar tu cuerpo sobre el mío sometiéndome, entregándome tu aliento en cada vaivén y yo sintiéndome morir...

Tus manos en mi espalda, tu lengua jugando en mi piel, tu aliento recordándome el por qué de perderme en tu piel.

Algo quedó ahí, por que cuando cierro mis ojos no puedo sacarme de la mente tus manos recorriéndome lentamente, ni tus besos tan sutiles que me estremecen por completo.

Si mi piel hablara... reclamaría esas caricias lejanas que me erotizan tanto el cuerpo, los sentidos, todo.