Saturday, September 01, 2007

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Molestia. Ese es el adjetivo que más me acomoda.

Por creer en palabras que sólo hacen eco en un vacío sin remedio. Por permitirme sentir aquello que sólo me traerá esa resaca que me es tan familiar ultimamente. Por dejar que mi orgullo doblegue y pase por alto situaciones que en otras condiciones no lo haría. Y más por simplemente colgarme ilusiones no correspondidas.

¿Acaso es tan complejo entenderme? No pedía mucho, sólo algo de consideración. Yo la tengo. La tuve. Estoy cansada.

Me gustan las entregas, pero no esas que comprometen sólo un par de momentos. Al fin y al cabo estuve advertida. Mea culpa.

Debo aprender que las situaciones complejas no están hechas para mi. Una lección más, tonta. Lo siento, no sirvo para esto, no contigo.

Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

4 comments:

®øЮïgõ said...

Odio cuando el puede debilitar las piernas, cuando solo el puede ver mas allá de la coraza, odio cuando el sabe que lo amo y juega con ese sentimiento, odio cuando de aprovecha de mi debilidad.

Morgana said...

upssss, advertidas estamos...pero ahi andamos de babas....chale, debilidad femenina...

saludos

Abi Finch said...

Odio estar sentada, esperando que se de cuenta...

Orizschna said...

Detesto cuando alguien sabe que me duele y se agarra de ahi para torturarme.
No estoy tampoco para juegos mentales.
UN beso Priscila.
Una entrada muy chingona