Las conversaciones telefónicas con ese tono tan tuyo me hacen vulnerable. ¿Cómo explicarte lo que tus palabras me hacen sentir? Sí, mi trato puede ser indiferente a veces pero... ya sabes lo que dicen.
Las palabras sobran cuando sabes como hablarme y mi respiración se agita... y lo sabes. Las palabras sobran cuando los "te extrañé" salen justamente de ti... y me encanta. Las palabras sobran cuando tu sentir se hace presente... y yo tiemblo.
El color de tu voz es rojo, aquél que cada noche imagino en mi cama. Rojo de ti.
No abandono, jamás.