No sé como llamarle a esto. No es por que las acciones que abarca no se sepan de antemano. No, no es eso. Es sólo que es tan refrescante no ponerle nombre, no llamarlo por lo que es y simplemente vivirlo.
Me hace sonreír cada vez que antepones una negativa por excusa para no dejarte llevar por la circunstancia, cuando estás dentro de ella desde hace tiempo. Yo no te pido que lo digas, yo tampoco lo diré pero vamos, esas cosas se sienten en el aire.
Justo como tú, tampoco tengo idea de hacia donde va esto. Ni qué significa. Mencionaste algo sobre el tiempo, es tuyo.
Lo único que si pediré, es que sigas paseándote por aquí, trayendo esa sensación de familiaridad y complicidad que la gente comunmente llama química. Y por si acaso, abre la ventana para que entren las mariposas amarillas.
9 comments:
Que bonito.. tenia tiempo que no leía algo así!
saludos!
Este post no tiene madre. Una de las mejores circunstancias por las que puede pasar el ser humano. Amén y felicidades, sólo por sentir eso :D
Me había perdido , pero ya volví !
Un abrazo !
Que gratificante es irse de vacaciones con una circunstancia así esperandote o no?
Disfrute la circunstancia los nombres, las etiquetas..esos pueden esperar.
Saludos niña!
Finalmente, las circunstancias como la que aduces son quienes le dan sazón a esto de vivir; a veces no como uno quisiera, en fin.
muy bonito tu post.
Un abrazo, q ests bien.
uuuh! komplicidad eso me gusto!!
prisss... sorry por andar d perdida d vaga jeje... pero aki ando chekandole aun...
besitos
Y así, sin nombres, ni preceptos, el momento se va haciendo nuestro sin más, y sin menos.
Que fabuloso debe ser colarse por esa ventana...
Abrazos, y por si acaso, felicidades por este año que termina, por este que empieza y por las circunstancias sin nombre ni concepto.
Efe
la etiquetas solo vienen a dar en la madre, como el frente frio de invierno, solo estorba, entumece, pierde sentido. kierote!!
La circunstancia: Un huracán de mariposas
Post a Comment